Mientras el Presidente de la República francesa se dirigía hoy al Memorial de Montluc, la cárcel militar de Lyon, donde encarcelaron durante la segunda guerra mundial a los judíos y a los resistentes, a rendir homenaje a la gran figura de la Resistencia francesa, el gran amigo de los Republicanos españoles, Jean Moulin, me encaminé al monumento del escultor Shelomo Selinger con versos de Aragón en la plaza del 8 de mayo de 1945 de La Courneuve a depositar flores tricolores.
Tras colocar la Tricolor y mi ramo en el monumento, tras hablar con una joven de unos treinta años que esperaba el autobús y que no sabía qué se había conmemorado y a la que expliqué que la victoria contra los monstruos nazis y fascistas de la segunda guerra mundial, saqué fotos de los diversos ramos oficiales, entre ellos el del Consejo Comunal de los Niños, lo que es una excelente iniciativa, que participen los niños inocentes en los homenajes a las víctimas del nazismo, del fascismo y que oigan, aunque aún no entiendan, los homenajes a los resistentes que combatieron aquellas monstruosas ideologías, que no tienen que volver a tomar el poder ni en Europa y en ningún sitio.
Después, mientras ya recibían al Señor Emmanuel Macron en la prisión Memorial, como no se logró que lo fuera la cárcel madrileña de Carabanchel (destruída a pesar de muchas luchas), me dirigí a la gran placa del barrio céntrico de Bobigny, sita al lado del centro cultural dedicado a Maurice Nilès, alcalde de Drancy de 1959 a 1997, gran luchador y resistente, preso en el campo de internamiento de Voves (donde hubo hasta 27 españoles presos deportados a Neuengamme, según consta en el libro de Etienne Egret t Dominique Philippe Voves 1942-1944 un camp en Eure -et -Loir) y que tuvo gran respeto por los Republicanos españoles en la ciudad que administró, donde eran numerosos. Quise rendirle también homenaje hoy porque le recuerdo con emoción. Nos hacía distribuir de premio a los escolares libros adornados con lazos y aún conservo un cuento de hadas y el diccionario de francés regalado por sacar el bachillerato. Le agradecemos infinitamente haber dedicado calles a Cristino García y a Julián Grimau y haber condecorado con la legión de honor a la deportada vuelta el infierno de Ravensbrück, Mercedes Núñez Targa.
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